OTRO RESURGIR EN ANFIELD

Dailly Telegraph

Esta noche ha vuelto a haber espectáculo en la ciudad de los Beattles. Por fín el Liverpool ha cuajado un gran partido esta temporada, ganando por 3-0 al Manchester City. Tras la marcha de Torres el equipo se reforzó y ya está empezando a dar sus frutos con una exhibición de un fútbol excelente ante un equipo fortísimo y al que es muy complicado hacerle un gol, ya que es el segundo equipo menos goleado de la Premier tras el Chelsea. Andy Carroll y Luis Suárez fueron los conductores del juego del equipo red y con sus acciones desequilibraron el encuentro.

El partido del lunes enfrentaba a dos equipos que están, aunque un poco distanciados, luchando por las plazas que dan acceso a competiciones europeas de cara al año próximo. El partido podía considerarse como una prueba para ver si el nuevo Liverpool podía responder ante un encuentro de tal entidad y supo dar la cara, pero no la de siempre, esta vez dió una nueva gracias a sus dos jóvenes talentos, con los que pretende ganar los partidos que quedan y acceder a puestos de Champions League.

Todo parecía oscuro con la marcha de Torres, pero con el dinero obtenido de su venta se hicieron dos grandes fichajes y visto el rendimiento de Torres esta temporada, parece que no ha sido del todo erronea la maniobra realizada.
Carroll hoy ha demostrado la polivalencia que tiene en el campo, algo que ya se conocía cuando militaba en el equipo de las urracas pero que podía dudarse su capacidad de jugar en un equipo que aspira a cosas mayores. Pues bien, hoy con un tremendo zurdazo desde fuera del área y un gran remate de cabeza de libro, colocado a la escuadra (ver vídeo), ha demostrado que sí está listo y que tiene muchas ganas de convertirse en el nuevo "nueve" de la afición red.



No hubiera jugado de esa forma tan polivalente el Liverpool de no ser por el charrúa del equipo, Luís Suárez, que abrió al equipo de forma impresionante y fue un quebradero de cabeza para la defensa rival. Gracias a su velocidad y su visión de juego, el equipo dominó el balón casi todo el tiempo, a pesar del centro del campo de Mancini. El desgaste que realiza este jugador es muy similar al que nos tiene acostumbrados Kuyt, pero la calidad que atesora en sus botas en infinitamente superior.

El equipo tiene un nuevo aire; volcándose en ataque pero sin partirse en dos, son constantes sus llegadas al área tanto por el centro como por las bandas y le gusta tener el balón en el campo del contrario.
Hoy la gente de Liverpool ha descubierto que el mundo no se acaba en Torres y que el jugador inglés de 22 años, Andy Carroll, va a hacer disfrutar de muchas tardes de gloria a dicha afición, eso sí su pareja de baile Luís Suárez no merece menos aunque hoy no marcó debido a que se encontró con el portero y posteriormente con el poste.

Una nueva etapa ha llegado a la orilla del rio Mersey y parece que va para largo. La afición volverá a entonar el When the reds go marching in.

Fdo: MONO BURGOS